“Os dirijo unas palabras de saludo y bienvenida a cuantos visitéis estas páginas. Sí, señor, entramos en el ciberespacio. Que ello sea un medio para acercar al evangelio y a la Eucaristía desde este “púlpito virtual”. ¿No serán estas las nuevas “azoteas” y “areópagos” desde las que hay que anunciar a Cristo? ¿No será una de las formas de obedecer la consigna del Santo padre: “Boga mar adentro”?Si santa Teresa dice que Dios anda entre los pucheros, ¿no habrá que dedicarse a esta navegación cuando hoy se cocina menos y se navega más?
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